André Kuipers nos cuenta todo sobre su tiempo en el espacio

Cuando tenía 12 años, André Kuipers recibió tres libros de ciencia ficción de su abuela. Había algo en las historias sobre el espacio que le atraía. ¡Él también quería viajar por el cosmos! Ese momento marcó el inicio del sueño espacial de André, que decidió darlo todo para hacer realidad su deseo. Logró cumplir este sueño, e incluso escribió libros al respecto. En colaboración con YourSurprise, le entrevistamos acerca de su nuevo libro infantil, ‘El pequeño astronauta en un viaje a los planetas’

¿Con qué soñabas cuando eras pequeño?

"Con cohetes, naves espaciales, alienígenas y aventuras en otros planetas. Me imaginaba, por ejemplo, que el edificio del periódico Het Parool que estaba junto a nuestra casa era una gran nave espacial. Cuando me hice algo más mayor, me di cuenta de que ser astronauta era la combinación perfecta de una actividad útil y aventurera. Esto me atrajo. Pero, como la exploración espacial era cosa de los Estados Unidos y más allá del Telón de Acero, el oficio de astronauta no parecía estar destinado a mí. Así que me puse a estudiar medicina".

"El camino al espacio es largo"

¿Qué te inspiró a convertirte en astronauta?

"La exploración espacial me seguía atrayendo. Por eso, me fui a trabajar como médico a la Agencia Espacial Europea (ESA). Allí trabajé, entre otras cosas, en los preparativos de experimentos médicos en el espacio, y sabía muy bien en qué consistía realmente la labor de un astronauta. Nunca abandoné mi sueño, y me pareció que tenía que intentarlo todo para llegar a ser astronauta. Aunque solo fuera para no arrepentirme nunca de no haberlo hecho".

¿Cuánto dura la formación para convertirse en astronauta, y en qué consiste?

"El camino al espacio es largo. En primer lugar, tienes que completar unos estudios en el ámbito científico y tener como mínimo tres años de experiencia en tu propia especialización para poder cualificar. La Agencia Espacial Europea (ESA) selecciona, de media, un grupo de unos seis astronautas una única vez cada diez años. De manera que tienes que esperar pacientemente el momento en el que puedas presentar tu solicitud, junto a otros 10 000 interesados. Hasta entonces, tienes tiempo para trabajar en tus aptitudes. Yo, por ejemplo, obtuve mi licencia de piloto y mi certificado de buceo. Otros aprenden ruso o intentan seguir desarrollando otras cualidades. Y es que la ESA no busca atletas de élite o científicos especializados, sino personas "todoterreno" que puedan trabajar muy bien juntas. Si te seleccionan, a partir de ese momento empieza tu formación con una instrucción básica. Después, para una misión espacial entrenas alrededor de cuatro años en diversos lugares del mundo. Los astronautas deben tener muchos talentos y mantenerse sanos y en forma. Allí arriba realizan experimentos para los científicos en tierra, deben ser capaces de efectuar complejas reparaciones y aprender a manejar el inglés, el ruso o, en el futuro, quizá hasta el chino".

"La ciencia y la tecnología son importantes y divertidas"

¿Qué impacto han tenido los viajes espaciales en tu vida? ¿Te han llevado a pensar de otra forma sobre nuestra vida en la Tierra?

"Por supuesto. Desde el espacio, nuestra Tierra es una maravillosa esfera azul en medio de la nada negra y hostil. La atmósfera es muy fina, y puedes ver claramente lo que causa el ser humano: incendios forestales, tala a gran escala, erosión, contaminación atmosférica, innumerables buques pesqueros en el mar... Allí arriba te das cuenta de que compartimos la Tierra con toda las demás personas, los animales y las plantas. Debemos dar más tiempo a nuestro planeta para que se recupere, para que todos podamos vivir bien".

¿Qué te gustaría transmitir a los niños?

"Al mirar a la Tierra desde el espacio, ofrecemos a los niños una perspectiva muy diferente de nuestro hermoso pero frágil planeta. Cuando los niños se dan cuenta de que la Tierra en realidad no es más que una gran nave espacial con recursos limitados a bordo, aumenta la conciencia de que debemos cuidar de nuestro fantástico planeta. No puedes gastar todos los recursos impunemente. Además de eso, también quiero mostrar que la ciencia y la tecnología son importantes y divertidas. Para afrontar los desafíos del futuro con ayuda de la ciencia y la tecnología, necesitamos gente joven capaz de pensar de forma original y creativa. Espero inspirar a los niños pequeños con mis historias, que tienen lugar en el espacio. ¡Que, como niño, tengas un papel protagonista en un libro de aventuras como "El pequeño astronauta" es, por supuesto, ideal!"

¿Qué más sueños tienes para el futuro?

"Me parecería fantástico presenciar el momento en que la humanidad pise por primera vez Marte. Se trata de una misión increíblemente compleja y, por este motivo, probablemente sea el punto álgido de los viajes espaciales tripulados de este siglo".

Una pregunta más: ¿con qué regalo te podrían hacer realmente feliz?

"De niño me encantaba leer, y sigue siendo así. Aunque mis estanterías ya están a desbordar, ¡lo que más feliz me hace es un buen libro!"

El libro ilustrado de André Kuipers "El pequeño astronauta en un viaje a los planetas" está a la venta en dos tamaños: ¡un formato normal y una versión extragrande para sumergirte en ella por completo! Se trata de un libro ilustrado muy especial, en el que el pequeño lector incluso es uno de los protagonistas.